Hace algunas semanas hablábamos del botiquín casero y cómo es conveniente tener uno, en qué condiciones y qué elementos debemos guardar en él. Decíamos que debía contener algunos medicamentos que necesitemos puntualmente para molestias que no precisasen en principio de una valoración médica inmediata como analgésicos, antitérmicos, antiinflamatorios, antidiarréicos… También los medicamentos que usemos por cualquier enfermedad crónica y además material para hacer unas curas básicas. De esto último trataremos hoy.
Muchas veces en nuestra propia casa pueden ocurrir pequeños accidentes domésticos que con un botiquín a mano podremos resolver sin más y otras veces nos permitirá hacer una primera cura antes de acudir a un centro sanitario. Debemos revisar periódicamente que ese material se encuentre en buen estado, que los elementos estériles que estén intactos, los envases bien cerrados y comprobar las fechas de caducidad. El material que se pueda volver a utilizar en próximas ocasiones debe guardarse limpio y/o desinfectado, si se ha usado para una herida abierta.
Lo primero a tener en cuenta para realizar cualquier cura es que hay que realizarla en las mejores condiciones higiénicas y de asepsia que podamos conseguir en casa. El lavado de manos es imprescindible: agua y jabón, frotar durante un minuto las manos hasta las muñecas friccionando bien entre los dedos, yemas de estos y palmas. Si además tenemos un gel hidroalcohólico, mejor que mejor, pero no es imprescindible. Vamos a enumerar algunas cosas básicas que nos pueden ser útiles tener:
- Tijeras de punta redondeada que se tendrán solo para uso del botiquín. Se deben lavar con agua y jabón para retirar restos y desinfectar con alcohol de 70º siempre después de cada uso.
- Pinzas: útiles para extraer cuerpos extraños o astillas en la piel. También se deben limpiar correctamente después de cada uso y desinfectar. Además puede usarse una aguja intravenosa cuando los cuerpos extraños están más profundos o son muy pequeños porque permite cortar la piel con el bisel, sin hacer mucho daño. Se puede usar para romper una ampolla por una rozadura de zapato antes de limpiarla con antiséptico y cubrirla con un apósito. Si se usa, se debe eliminar en un contenedor adecuado para agujas.
- Jeringa desechable: para lavados de heridas y lavados nasales, con suero fisiológico. También se usa para administrar jarabes ya que la dosis se puede dar más ajustada y se maneja mejor en su administración que la cuchara, por ejemplo en niños pequeños.
- Tiritas, son mejor las de tela que las de plástico y apósitos de tejido sin tejer ,son un poco más grandes que las tiritas, de tejido hipoalergénico , llevan un cuerpo central de algodón y permiten cubrir zonas más extensas.
- Esparadrapo hipoalergénico para fijar apósitos, vendas.
- Gasas estériles . Sirven para la limpieza y secado de la herida así como para cubrir la misma posteriormente y evitar que se infecte. Son de un solo uso. No se debe utilizar algodón para tratar directamente sobre una herid , porque deja restos adheridos a ésta.
- Vendas de algodón para sujetar las gasas tras una cura , vendas elásticas, para cubrir lesiones en muñeca , codo, rodilla, tobillo…, al ser elásticas , se adaptan mejor a estas zonas y evitan poner esparadrapo directamente sobre la piel. En un momento determinado podemos utilizarlas para hacer un cabestrillo improvisado.
- Bolsa térmica: Se recomienda aplicar frío después de un golpe, para disminuir la inflamación o en torceduras. El calor seco es más adecuado para otros procesos como lumbalgias o contracturas.
- Guantes desechables, de vinilo u otro material que no sea látex, para reducir el riesgo de contaminar al hacer la cura. Es mejor no utilizar guantes de látex por el riesgo de alergias a este material, que a veces es desconocido.
- Termómetro digital, es el mejor por su lectura rápida y sobre todo porque no tiene mercurio. También están los óticos que son muy cómodos, rápidos y fiables.
- Antiseptico de uso tópico. Los que debemos usar son: la povidona yodada y la clorhexidina .Se deben aplicar después de limpiar la herida. Los antisépticos despejan la zona donde se aplican de agentes patógenos , microorganismos y esporas. De esta forma se garantiza una mejor cicatrización de la herida ya que se disminuye el riesgo de infección. Las heridas infectadas no cicatrizan hasta que se ha eliminado la infección.
La povidona yodada ( Betadine) Es el antiséptico más extendido, tiene un gran poder bactericida pero se inactiva en presencia de sangre, exudados por lo que se usará en heridas recientes sin restos de sangre o pus. Se absorbe por la piel por lo que las mujeres embarazadas y en período de lactancia, deben evitar la aplicación de povidona yodada en áreas extensas de la piel y en la zona vaginal, así como su uso prolongado, sin consultar antes al médico. Tampoco se debe usar en lactantes. El yodo se deja secar durante un minuto una vez aplicado antes de cubrirla herida y no debe usarse si se sospecha de alergia .
La clorhexidina, ( Cristalmina) es uno de los mejores antisépticos para usar en casa (acaba con gran variedad de gérmenes). No es irritante ni se absorbe por la piel y a diferencia de otros antisépticos, no se inactiva en presencia de materia orgánica. Alcanza un efecto máximo en 20 segundos. . Por todas estas cualidades parece ser uno de los más indicados en la desinfección de heridas, usando sus concentraciones del 0.02 al 2%.
Los antisépticos no deben mezclarse, se usa uno u otro pero no se alternan. Los envases con que se aplican no deben tocar la piel ni las gasas para evitar que se contaminen para usos posteriores.
Hay otros antisépticos que quizás utilicemos y que deberíamos abandonar para realizar curas, como el mercurocromo ( Mercromina) que tiene muy baja efectividad , el alcohol que solo es eficaz en piel integra ( vemos que lo usan para desinfectar la piel antes de poner una inyección o hacernos un análisis) pero que en heridas, deseca la piel y forma una costra (la postilla de toda la vida), debajo de la cual pueden acumularse bacterias y causar una infección; tampoco debe usarse el agua oxigenada , que en todo caso puede servir para limpiar la herida pero luego deberemos usar otro antiséptico.
- Suero fisiológico , útil para limpieza de heridas de forma aséptica .También para lavados nasales con jeringa, para descongestionar en afecciones de vías altas así como en lavado de ojos cuando hay secreciones o algún cuerpo extraño que molesta mucho. Tras cada utilización se debe rechazar el sobrante o usarlo como mucho en las próximas horas.
- Producto a base de amoniaco , útil para aliviar las molestias por picaduras de mosquitos y otros insectos, los encontramos fácilmente en la farmacia.
- Pomada para quemaduras superficiales ( salpicaduras aceite, agua caliente, café, contacto con cosas calientes…), aunque lo mejor ante una quemadura es sumergir la zona afectada en un recipiente de agua fría durante unos 20 minutos, ya que el frio bloquea la inflamación y tiene efecto anestésico; así evitaremos que salga ampolla o que sea menor. Si la quemadura es muy superficial , de primer grado, en la que solo hay enrojecimiento o hipersensiblidad , bastaría con una crema a base de óxido de zinc tipo las que se usan para eritema de pañal de los bebés. También puede usarse alguna de Aloe vera porque reduce la inflamación y el enrojecimiento. Si la quemadura es de segundo grado superficia o con con ampolla, usaremos una con Sulfadiazina argéntica. Pero ya en este caso o si es una quemadura grande o profunda lo mejor acudir cuanto antes a un centro sanitario. No se deben aplicar en las quemaduras productos tales como aceite, manteca, hielo , pasta dentífrica, etc.
- Crema para quemaduras solares: Siempre debe utilizarse un fotoprotector alto si nos vamos a exponer al sol , entre 30 y 50 FPS. Pero si tras tomar el sol nos aparece una quemadura podemos usar lo mismo que en el caso anterior. Si hay quemaduras graves, extensas o con ampollas , se debe acudir a un centro sanitario para que las valoren y traten adecuadamente.
- Pomada para escoceduras de la piel , debidas al sudor , roce de alguna prenda, contacto con algún agente irritante que causan enrojecimiento y sensación de quemazón . El oxido de zinc actúa como desinfectante y además tiene un efecto secante ideal para aplicar en zonas con irritaciones húmedas, además de un efecto calmante. Podemos usar la misma que en las quemaduras leves.
En la farmacia nos indicaran varias cremas o pomadas con estos productos que es conveniente tener en el botiquín casero.
Con todos estos elementos y productos que hemos enumerado podemos atender inicialmente y en muchos casos resolver esos pequeños accidentes o problemas que pueden surgir de repente en nuestra casa.
Elena Resines