Gaur egungo pandemiak norberaren erantzukizun soziala osasunean duen garrantzia erakusten du Paziente Bizia-Paciente Activo Programak funzionatzen duen modu berean.
Sars-Cov-2 transmizioa murrizteko oinarrizko bost gauza berrikusten ditugu: segurtasun-distantzia,maskara erabiltzea,esku-higienea,garbiketa, desinfekzioa aireztapena eta kontaktuen murrizketa.
Une korapilatsu hau arduraz bizitzea gure esku dago ¡¡
El estado de pandemia que estamos viviendo pone de manifiesto lo importante que es la responsabilidad personal para la salvaguarda de la salud personal y también social.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la promoción de la salud, como el proceso que permite a las personas incrementar el control sobre su salud. De este concepto se desprende que para ponerlo en práctica necesitamos de los individuos, de las comunidades, de las organizaciones, de las instituciones…etc.; creando con todos ellos los condicionantes necesarios que garanticen la salud y el bienestar para todos. Posibilitando dar una calidad de vida y el control efectivo sobre la salud de cada uno.
La promoción de la salud lo que hace es fomentar cambios en nuestro entorno que promuevan y protejan la salud. Por ejemplo, en un entorno urbano creando carriles bici para promover la actividad física. Algo que repercute positivamente en la población, participativo, intersectorial, acorde al contexto y realizado en diferentes niveles.
Pero ese carril bici hay que utilizarlo para que esa promoción de la salud sea efectiva; por tanto, precisa actitudes activas, dónde la ciudadanía se implique y se responsabilice de su salud.
Desde el programa Paziente Bizia-Paciente Activo se pretende formar a enfermos crónicos y cuidadores para hacerles agentes activos en el cuidado de su salud, sin que ello sea óbice para el correcto seguimiento de su médico o especialista.
En el caso actual, en el que una pandemia nos tiene afectados de forma general a toda la sociedad, esa determinación para convertirnos en agentes activos del cuidado de nuestra salud debería ser una actitud general y compartida por toda persona y desde aquí y como monitor del programa Paziente Bizia-Paciente Activo, hago un llamamiento a esta responsabilidad personal que debemos ejercer en el cuidado de nuestra salud y de la de aquellos con los que convivimos.
No creo que sea tan complicado seguir las directrices que nos trazan desde las autoridades sanitarias.

Vamos a repasar las cinco líneas básicas que pueden contribuir a reducir sustancialmente el riesgo de transmisión del SARS-CoV-2:
- Mantenimiento de la distancia de seguridad interpersonal de 1,5 metros.
Es una medida básica para estar fuera del radio de diseminación de las gotas respiratorias que transmiten la infección y que se producen al hablar, estornudar o toser.
Un gesto que todos podemos realizar y que no cuesta nada ponerlo en práctica.
- Uso de mascarillas e higiene respiratoria.
Como parte de la higiene respiratoria se considera el uso de mascarillas para evitar la diseminación de la infección cuando existe una mayor proximidad entre las personas y no sea posible mantener una distancia de seguridad interpersonal de al menos 1,5 metros. Al estornudar o toser, si no se lleva mascarilla, es importante utilizar pañuelos desechables para cubrirse la boca y la nariz, o en su defecto con el codo flexionado.
Otra medida que depende de nuestra responsabilidad y que cuida nuestra salud y la de los demás.
- Higiene de manos.
Medida importante por el papel de las manos en la transmisión del virus desde las superficies. Puede realizarse con agua y jabón, y también con soluciones hidroalcohólicas.
- Limpieza, desinfección y ventilación.
La limpieza y desinfección de las superficies en contacto con las personas tiene que ser frecuente. La ventilación adecuada y periódica es un factor muy importante a la hora de reducir el riesgo de contagio en espacios cerrados.
Estas dos últimas medidas deberían ser aplicadas siempre, ya que nos librarán de muchos problemas no deseados.
- Reducción del número de contactos.
Limitar el número de participantes en las actividades de grupo. En la medida de lo posible, tratar de que las actividades se realicen en grupos más pequeños, manteniendo grupos estables y un distanciamiento físico entre ellos.
Sin ser obsesivos, pero controlando e intentando recordar quienes han sido nuestros contactos para un posible futuro recuento en caso de ser descubierto cualquier contagio.
En nuestras manos está vivir este complicado momento desde la responsabilidad.
¡HAGAMOS TODOS UN PEQUEÑO ESFUERZO Y CONTRIBUYAMOS A VIVIRLO DE LA MEJOR MANERA POSIBLE!
Jose Cepero
Buenas tardes compañero@s, me alegra poder felicitar a Jose Cepeda por este escrito de ayer y ese ofrecimiento tan generoso pos su parte. Así que debo decirles que siempre estoy dispuesto para cualquier menester que crean oportuno. Muchos saludos de Avelino Masa
El jue., 29 oct. 2020 8:32, Osasun Eskola Blog: Paziente Bizia-Paciente
Me gustaMe gusta
Gracias por tu comentario Avelino. Un placer siempre contar contigo
Me gustaMe gusta