Hurrengo lerro hauetan, programa honek parte hartzera animatzea erabakitzen dutenentzat duen balioaren eta esanahiaren ikuspegi xumea emango dizuet.
Familia- eta komunitate-arretako erizaina naiz, eta gaixotasun kronikoak (diabetesa, esaterako) maneiatzen eskarmentua dut. Hala ere, alde batera utzi nituen arlo horretako nire esperientziak eta trebetasunak, tailerretako lidergoa benetan beren gain hartzen dutenen eta taldearen motorra direnen alde, hots monitoreen alde, halakorik ezean diabetesaren gaixotasuna duten pertsonak edo gaixotasuna duen pertsonaren zaintzaile nagusiak.
Benetan uste dut eta bihotzez sentitzen dut hemen egon izanak lagundu didala pertsona eta profesional hobea izaten. Ezarri ezazu helburu bat eta aste batzuez Paziente Bizia-Paziente Activoan parte har ezazu, uste dut ez zarela damutuko.
Activo y propósito, esas dos palabras definen mi paso y de quienes se aventuren a emprender el camino apasionante y atrayente de los talleres del Programa Paziente Bizia-Paciente Activo. Durante estas próximas líneas os daré mi humilde visión del valor y significado que este programa tiene para aquellos que decidan animarse a participar. Si quieres conocerlo, te animo a que sigas leyendo.
Durante siete semanas tuve la oportunidad de participar en el taller de Cuidando mi diabetes, y la verdad que la decisión de participar fue acertada. Se podría decir que mi recorrido por dicho taller fue un poco diferente al de los demás, sin a la vez marcar ninguna diferencia entre el grupo. Esta disparidad radica en que soy enfermero de atención familiar y comunitaria de profesión, y con experiencia en el manejo de enfermedades crónicas como la diabetes, sin embargo, mis experiencias y habilidades en este campo quedaron de lado para que quienes de verdad asumen el liderazgo en los talleres y quienes son el motor del grupo: los monitores, quienes en su defecto son o personas con enfermedad de diabetes o cuidadores principales de alguien que tiene la enfermedad. Entender esta premisa es esencial para que el rendimiento del taller sea el máximo y por supuesto, es uno de los mayores beneficios de este programa, característica sin igual del mismo, pues sí, el taller y todo el funcionamiento de las diferentes sesiones semanales se desarrolla entre iguales.
Iguales y diferentes al mismo tiempo, cada persona participante parte de una etapa vital diferente con la diabetes, hay quienes son todo un experto con años a sus espaldas de evolución de la enfermedad, hay quienes se les acaba de diagnosticar, están con dudas y miedos inherentes y comprensibles ante la reciente noticia, y hay quienes su motivación para estar allí es mejorar sus conocimientos y adquirir herramientas para combatir día a día con esta patología. Otros su contexto es diferente, no viven en primera persona lo que es la diabetes, pero entienden lo que implica para sus seres queridos, de esta forma me presente yo, pues además de ser enfermero, soy el cuidador principal de mi abuela que, como muchas de las abuelas de nuestros hogares, es diabética.
Como puedes intuir querido lector, la riqueza del grupo es notoria, pues todos los participantes partimos de una mochila de experiencias y aprendizajes diferentes pero que en resumidas cuentas confluyen en uno y es lo que nos une en este grupo: aprender a vivir de la mejor forma posible con la diabetes para nosotros mismos o para nuestro entorno.
Para ganar este objetivo, las siete sesiones del taller te adentrarán en todos los aspectos que son esenciales para que la enfermedad no sea una complicación más en nuestro día a día. Se hablará de alimentación, ejercicio, medicación, la gestión de emociones, las técnicas de relajación, usos de una buena comunicación, y se potenciará y pondrá en práctica una técnica muy útil que es el saber marcarse propósitos. Porque si por algo este programa lleva el apellido de activo es porque se contribuye semana a semana a realizar un propósito de cambio o mejora, porque si te animas a contarlo públicamente al grupo expondrás si has conseguido este propósito y donde el no conseguirlo no se castiga si no que se premia porque significa un nuevo aprendizaje en el camino. Se busca crear un ambiente donde todas y cada una de las opiniones sean válidas y se sientan libres para mostrarlas.
Creo y sinceramente de corazón lo siento, que haber estado aquí me ha ayudado a ser mejor persona y profesional. He podido escuchar en un clima donde se ha generado confianza entre el grupo cuales son las diferentes visiones, sentimientos y valores que cada uno de los participantes le da a esta enfermedad. No haber estado aquí me hubiera acercado menos a esta realidad que es la de salir de la consulta donde atiendes a este perfil de personas para sentir de cerca lo que es ser uno más de ellos, y quizás, me pueda equivocar, pero eso tiene un valor incalculable.
Márcate un propósito y de verdad únete por unas semanas al reto de ser uno más de Paziente Bizia-Paciente Activo, creo que no te arrepentirás.
Me despido con mi más goloso agradecimiento a todos los que hicieron posible haber estado ahí presente.
Carlos Canga