Txirristak. Toboganes

Forrest Gump gogora dezagun: «Bizitza txirrista bat bezalakoa da». Bihurgunez beteta, abiadura desberdinekin eta kudeatzen ikasi beharreko momentuekin.

Noizean behin, mundua kanpotik begiratzea ondo etortzen da, perspektiba berri batekin begiratzea, nondik gatozen, zer lortu nahi dugun eta nora joan nahi dugun jakiteko.

Batzuetan, gure bizitzan aldaketak egin behar ditugu, beste helburu batzuk pentsatu, gure patuak bideratu…

Une honetan fase horretan nago. Gauza asko lortu nituen, helburu pertsonalak eta profesionalak besteak beste.

Txirristan erortzea, bertigoa, beldurra,…

Berrasmatzea, eboluzionatzea, eraldatzea eta errealitate berriei aurre egitea.

Erronka berriak, epe laburrera, epe ertainera, luzera inork ez daki nora iritsiko garen.

Berriz ere aztertu, birpentsatu eta berriz asmatu.

Vamos a evocar a Forrest Gump: “La vida es como un tobogán”. Llena de curvas, con velocidades diferentes, y de vez en cuando, caídas de vértigo que hay que aprender a gestionar.

De vez en cuando, hay que pensar “Que paren el mundo, que me bajo!”. Pero no para dejarlo, sino para mirarlo desde afuera, coger perspectiva, ver de dónde venimos, lo que hemos conseguido y a dónde queremos ir.

Tal vez tengamos que retomar algo, cambiar la manera de hacer, pensar en otras metas, enfocar nuestros destinos, …

Estoy en estos momentos en esa fase. Conseguí muchas cosas, muy arriba, todos los objetivos personales y profesionales cubiertos, exhultante.

Caída en picado en el tobogán, vértigo, abismo, miedo, ….

Reinventarse, evolucionar, transformarse y cambiar y afrontar las nuevas realidades.

Nuevos retos, a corto plazo, a medio plazo, a largo nadie sabe dónde llegaremos.

Toca de nuevo revisar, repensar y reinventarte y volver a hacer desde cero, ¿qué? Todo lo que haga falta. Es la vida.

Fabricante-de-toboganes-acuáticos-en-España

Venan Llona @vllona

Ez nuen nahi izan hiltzen bizi: eta bizitza aukeratu nuen. No quise vivir muriendo: y elegí la vida.

Gaurkoan, zuekin, Rudyard Kipling-en olerki bati buruzko hausnarketa egitea gustatuko litzaidake.

Gure bizitza era desberdinetan bizi dezakegu: ikusle bat bezala, edo benetan bizitza gozatuz. Gauza txarrei alde positiboa ateratzen eta alderdi onak aprobetxatzen.

Hoy ha llegado a mis manos un poema de Elena Pérez Hoyos que además de encantarme me ha hecho reflexionar.

Reflexionar sobre algo que en mi casa hemos discutido muchas veces, y es sobre cómo quieres que pase tu vida, siendo un mero espectador o disfrutando de ella 100%, con sus cosas buenas y con las malas. Porque eso es VIVIR la vida, disfrutar de lo bueno y aprender de lo malo, buscar lo positivo que esa situación puede aportarte y tomarlo.

Cuando llega a nuestra vida una situación difícil, llámese enfermedad, dificultad, problema, etc., nadie se pone contento porque dice…. ¡Qué suerte he tenido, voy a aprender de esta desgracia! Pero la realidad es que a veces pasan cosas en nuestra vida, que no hemos elegido, que son dolorosas, que duelen y lo peor…no las podemos evitar. Pero cuando pasa, porque tarde o temprano pasa ¿podemos hacer algo?

Hace poco en una charla de lo más relajada con un grupo de niños con dificultades una niña dijo: «Me gustaría que mi vida fuera recta, que todo fuera más fácil, que no tuviera tantas curvas». A lo que otra niña contestó: «Quizás nuestra vida tenga muchas curvas, pero no podemos quedarnos ahí a lamentarnos, tenemos que aprender a conducir en las curvas».

Hoy leyendo este poema me he acordado de ellas y ha despertado en mí un gran sentimiento de orgullo hacia ellas. La vida no está exenta de curvas, para nadie, todos tenemos nuestros momentos de autopista recta y otros momentos de carretera de alta montaña llena de curvas. No es fácil conducir en estas carreteras pero con ganas de aprender, capacidad de adaptación y un poco de arranque podemos conseguirlo. Todos podemos conseguirlo.

Y lo escribo, me lo digo en voz alta, en baja, al oído, para mí y para los demás, de todas las formas posibles……porque, aunque realmente es lo que pienso a veces es difícil ponerlo en práctica. Pero sé que puedo, sé que soy capaz, solo hay que dar un paso al frente y empezar a caminar o en este caso a conducir por la carretera de curvas.

Os dejo el poema para que lo leáis y me gustaría saber si ha despertado algo en vuestro interior.

Elegí la vida

No quise dormir sin sueños:

y elegí la ilusión que me despierta,

el proyecto que me llena,

y no la vida vacía de quien no busca nada,

de quien no desea nada más

que sobrevivir cada día.

No quise vivir en la angustia:

y elegí la paz y la esperanza, la luz,

el llanto que desahoga, que libera,

y no el que inspira lástima en vez de soluciones,

la queja que denuncia, la que se grita,

y no la que se murmura y no cambia nada.

 

No quise vivir cansado:

y elegí el descanso del amigo y del abrazo,

el camino sin prosas, compartido,

y no parar nunca, no dormir nunca.

Elegí avanzar despacio, durante más tiempo,

y llegar más lejos,

habiendo disfrutado del pasaje.

 

No quise huir:

y elegí mirar de frente,

levantar la cabeza,

y enfrentarme a los miedos y fantasmas

porque no por darme la vuelta volarían.

 

No pude olvidar mis fallos:

pero elegí perdonarme, quererme,

llevar con dignidad mis miserias

y descubrir mis dones;

y no vivir lamentándome

por aquello que no pude cambiar,

que me entristece, que me duele,

por el daño que hice y el que me hicieron.

Elegí aceptar el pasado.

 

No quise vivir solo:

y elegí la alegría de descubrir a otro,

de dar, de compartir,

y no el resentimiento sucio que encadena.

Elegí el amor.

 

Y hubo mil cosas que no elegí,

que me llegaron de pronto

y me transformaron la vida.

Cosas buenas y malas, que no buscaba,

caminos por lo que me perdí,

personas que vinieron y se fueron,

una vida que no esperaba.

Y elegí, al menos, cómo vivirla.

Elegí los sueños para decorarla

la esperanza para sostenerla,

la valentía para afrontarla.

 

No quise vivir muriendo:

 y elegí la vida.

Así podré sonreír cuando llegue la muerte,

aunque no la elija…

… porque moriré viviendo.

Elena Pérez Hoyos

Quiero dedicar este poema a todas aquellas personas que están pasando por las curvas en estos momentos, quiero deciros que yo sé que puedo llegar a la meta y sé que vosotros también podéis hacerlo, así que no dejéis que el miedo os venza y…….. ¡adelante!!!!!!

Esti Gamboa

Bakardadearen Ministerioa. Un Ministerio de la Soledad

Hace unos meses vi la noticia: “La primera ministra británica, Theresa May, anunció la creación de un Ministerio de la Soledad”.

Erresuma Batuan, bakardadea arazo larri bat da.

La soledad en el Reino Unido es un asunto de Estado. Este mal, que según un reciente estudio afecta a 9 millones de británicos. Se estima que en Inglaterra, la mitad de los ancianos de 75 años viven solos, lo que equivale a unos 2 millones de personas.

Txosten batek dioenez, bakardadeak, osasunera arazo larriak ekar ditzazke.

Un informe habla de una epidemia social de excluidos y asegura que la soledad causa serios problemas de salud a la tercera edad. Y puede ser tan perjudicial como fumar 15 cigarrillos al día. Aunque este fenómeno no distingue edades, los más afectados son las personas mayores. Sigue leyendo

Zein erraza den batzuetan eramaten uztea!¡Qué fácil es a veces dejarse llevar!

Estresa, arazoak, zailtasunak, inpotentzia… ezezkotasuna gure bizitzetara iristen denean, dena kutsatzen duela ematen du.

Estrés, problemas, dificultades, malos rollos, impotencia, y parece que cuando la negatividad llega a tu vida todo se contagia….. Eso o es que yo ya lo veo todo con un prisma muy oscuro.  Cuando las cosas vienen mal dadas parecen que unas atraen a las otras. Como diría mi abuela, que era muy sabia, A perro flaco todos son pulgas.

Zuei gertatu al zaizue? emozio txarrak gripea baino errazago kutsatzen direla ematen du!!

¿No os ha pasado esto nunca a vosotros? ¡¡¡Parece que las emociones negativas se contagian con más facilidad que la gripe!!!

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